Un inhibidor especifico de una pequeña moléculareguladora de ARN denominada “microARN-100” puede utilizarse para estimular elcrecimiento de nuevos vasos sanguíneos, si una arteria principal sufre unaoclusión crónica. Este es el resultado de un estudio experimental realizado recientementeen el Hospital Universitario de Friburgo, en Alemania y financiado por laFundación Alemana para la Investigación. En un modelo animal para enfermedadesde arterias periféricas, después de un tratamiento con el inhibidor llamado“antagomir” se ha mejoradosignificativamente el flujo de sangre a las piernas.
Los micro ARN son una clase de moléculas descubiertasrecientemente las cuales se pueden unir a otros ARN con el objetivo de regularla expresión de varios genes a la vez. Existen más de 1000 micro ARN diferentesen los seres humanos; además existen estudios recientes que muestran laimportante función de estas pequeñas moléculas reguladoras en muchos aspectosde enfermedades cardiovasculares, desde la aterosclerosis hasta en el fallocardíaco. Se estima que más del 30% de todos los genes se ven influenciados porlos micro ARN.
Los investigadores de Friburgo describen por primeravez los cambios que ocurren en la expresión de micro ARN si una gran arteria sebloquea y se generan nuevos vasos sanguíneos como mecanismo de compensación.“Hemos seleccionado los micro ARN que tenían el mayor cambio en su expresiónpara posteriores análisis” explicó el doctor Sebastian Grundmann, director dela investigación. “Los niveles del micro ARN-100, el cual se expresa en altascantidades en vasos sanguíneos en reposo, disminuyen rápidamente si se produceuna proliferación de pequeños vasos sanguíneos como mecanismo de compensación ala oclusión de una arteria. Sin embargo, en los pacientes en los que se produceesta proliferación de vasos como mecanismo compensatorio, a menudo resultainsuficiente para llevar la sangre necesaria a los tejidos en riesgo”.
Se podría utilizar una inhibición farmacológicaadicional con el antagomir, con el objetivo de de estimular este mecanismonatural adaptativo. “En el grupo sometido al tratamiento, el flujo de sangreaumentó en casi un 30%”, resume el Doctor Grundmann del resultado principal delestudio. “Y se podría mostrar que el objetivo principal del micro ARN-100 es elgen mTOR, el cual es el responsable de este efecto”.
El mTOR, el cual es la diana en los mamíferos de larapamicina, es una molécula central de transducción de señales, con unaimportante función en la proliferación celular, en el crecimiento de los vasossanguíneos y en la regulación metabólica. Actualmente se están evaluandoinhibidores de mTOR para tratar diversas enfermedades oncológicas ycardiovasculares. El descubrimiento de que el micro ARN-100 actúa como unmodulador endógeno de mTOR, extiende la posible función de este pequeño ARN masallá de la regulación del crecimiento de vasos sanguóneos.
Desde que el micro ARN-100 y el mTOR no son específicosde los vasos sanguíneos, los posibles efectos secundarios que puedandesencadenar son también una preocupación. De hecho, los primeros resultadosobtenidos por el grupo de Friburgo demuestran que el inhibidor del microARN-100 también afecta a los procesos inflamatorios, un efecto no deseado de enla enfermedad cardiovascular. “Junto con colaboradores expertos, estamosinvestigando actualmente al micro ARN-100 y a su inhibidor en varios modelosanimales de otras enfermedades, en donde ya sabemos que mTOR es crítica enestas enfermedades”, explicó el Doctor Grundmann. “Los resultados que obtuvimoscon el micro ARN-100 en los vasos sanguíneos muestran que este micro ARN es unblanco atractivo para futuras terapias de enfermedades cardiovasculares”.
Esta investigación fue presentada en la European Society of Cardiology, en Paris, el 28 de Agosto del 2011.
Fuente: Science Daily